He leído esta frase y no dudé en ilustrarla, contiene un mensaje tan simple como poderoso, una reflexión sobre lo impermanente de las cosas. La vida como una danza en donde las cosas y las personas vienen y se marchan y el amor que permanece, en otra forma, en otra mirada, en otra sonrisa.
"Cada cosa que amas,
es muy probable que la pierdas,
pero al final,
el amor volverá de una forma diferente".
Kafka y la muñeca: la omnipresencia de la pérdida, de May Benatar.